Hace años se decía
que nuestro pueblo era un pueblo de Agua, hilo y melocotones. Agua porque el
río Noguera Ribagorzana pasa rozando Alfarràs y el Canal de Pinyana lo cruza
por el medio. Hilo porque hasta hace pocos años existían dos fábricas de hilo
aprovechando la fuerza del agua del canal. Y melocotones porque antiguamente
era un pueblo más agrícola que de servicios y esta fruta era de la que había
mayor producción. Desde hace más de 19 años se celebra la Fira del Préssec de
Pinyana en octubre para potenciar esta variedad de fruta. El acto central es la
exposición de fruta y se aprovecha para organizar una muestra de maquinaria
agrícola y diversas actividades lúdicas.
Dentro de éste
certamen se ha celebrado el Concurso gastronómico, categoría entrantes, con
melocotón de Alfarrás. Era la segunda vez que me presentaba a un concurso y
tuve la suerte de ganar. La suerte del principiante. Aquí os dejo la receta
ganadora. Probarla y ya me diréis que os parece.
Ingredientes (para unos 20 saquitos):
2 cebollas grandes
2 melocotones maduros grandes
40 gr. de micuit de pato o bloc de foigras de oca
20 gr. de boletus (ceps) deshidratados
10 hojas de pasta brick o filo
150 gr. de mantequilla (puede ser salada)
Cebollino o cordel para atar los saquitos.
Pelamos y picamos
la cebolla bien fina. La ponemos en una cazuela tapada con un pellizco de sal y
dejamos que se poche muy lentamente. Aproximadamente una hora. Pelamos y
cortamos muy finos los melocotones. Cuando veamos que la cebolla empieza a
tomar un color tostado añadimos los melocotones. Dejamos cocer lentamente
durante unos 20 minutos.
Una vez el
melocotón está tierno retiramos del fuego y escurrimos el aceite. Ponemos a
hidratar los boletus en un bol con agua preferentemente tibia. Con unos 30
minutos habrá suficiente. Dividimos el sofrito en dos y en uno añadimos los
boletus y en el otro el foie. Ponemos al fuego unos cinco minutos, en dos cazos
por separado, para que quede todo bien unido y dejamos enfriar.
Encendemos el
horno a 200º arriba y abajo.
Ponemos la
mantequilla al microondas para que se vuelva líquida y podamos utilizarla para
pintar con un pincel la pasta brick. Cogemos una hoja brick, la pintamos con la
mantequilla, la doblamos por la mitad y la partimos con un cuchillo por la
mitad. Nos quedaran dos cuadrados de dos hojas cada uno. Volvemos a pintar con
mantequilla, incorporamos una cucharadita de relleno y atamos con cebollino o
cordel. Si lo hacemos con esto último hemos de pensar en retirarlos una
vez saquemos los entrantes del horno. Ya que tenemos dos rellenos cabe la
posibilidad de atarlos de dos formas diferentes: tipo caramelo y tipo saquito.
Podemos repetimos la operación hasta que se acaben las hojas o el relleno.
Ponemos papel de horno en una bandeja y vamos colocando los saquitos. Horneamos
unos 10 minutos a 200º. Retiramos y dejamos reposar en una bandeja con papel
absorbente para que no queden muy aceitosos.
Buen provecho.
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